jueves, 31 de enero de 2019

Es demasiado fácil satanizar

En un mundo tan relativista, donde todo es lo que yo diga creer o el cómo las describo. Y, donde "primero pienso y luego existo" es la frase más mal usada fuera de contexto, usándola cuando lo que vemos lo definimos en base a lo que pensamos de ellas y no por poseer un valor propio e independiente de nuestra valoración, porque es un mundo real que ya existía antes que nosotros  y debe de ser descubierto, no creado desde nuestro pensar sobre él. Pero en un mundo corrompido es demasiado fácil satanizar las cosas aunque nunca se haya tenido una experiencia cercana con lo que satanizamos y por eso solo repetimos lo que hemos escuchado o lo que nos dice nuestra primera impresión.

Luego de ver la película de Dragon Ball Super: Broly, me di cuenta que al pobre Broly, desde los ojos de alguien que haya visto su pelea sin tomar en cuenta las razones del por qué pelea, lo señalan del malo en la historia (incluso antes de verla ya habían comentarios así).
Cuando el malo de la historia... Fue realmente Freezer. El enemigo no es quién hace de peón de ajedrez y lucha las batallas del rival; enemigos es aquel quien genera 2 cosas fundamentales: "la cizaña de los bancos" y "la razón de la pelea a muerte". Tal como hizo Freezer en la película, y como hizo Satanás en la historia de Adán y Eva.

En muchas ocasiones, nos pasa como a Broly: somos acusados, señalados y tachados de terribles, "los del problema" o simplemente como "los malos", por pura atención a nuestra "posición" en el problema (cualquier papel que estemos tomando en la historia) y no por las razones que tenemos para estar ahí.

El abogado, el acusado, la defensa y el juez; como policías y ladrones. Para esas posiciones deseamos siempre tener el poder de definirlos de si "es el bueno o si es el malo", y como seres racionales al fin (a veces, sin sentido común) decidimos crear esos adjetivos, sobrenombres.... para no tener que averiguar razones, solo para hacerlo fácil (el señalar). Por eso, un "crucificado" tiene que ser malo por obligación, porque algo malo debió hacer echo. Igual que el que se enfrenta al protagonista (Goku) tiene que ser malo porque sino no estaría peleando con él. Cuando realmente cada persona tiene razones particulares para ocupar una posición en cada escena del que somos parte o testigos, incluso si están ahí por razones lógicas, ilógicas; justas, injustas; por decisión libre o por obligación; por derecho o por deber... ¿Entonces, es más conveniente fijarnos en Posiciones o Razones?

Hagamos como los "cazadores de talentos espaciales" de la película: rescatemos vidas, esperanzas y personas perdidas. Pero para lograr eso, debemos de hacer como que no sabemos la historia de las personas y sentarnos un rato a hablar con ellas incluso si creemos conocerla... Hagamoslo al menos comiendo un chocolate. Dejemos de señalar antes de sentarnos a escuchar, fascinémonos por las vidas de los demás. Y aún escuchemos completamente la historia de alguien, no señalemos en etiquetas solo por saber en la posición en la que se encuentra en ese momento . Solo hagamos juicio para acompañar en corrección no para tachar de enemigo a nadie. Cada persona tiene razones para ser como es, estar donde está y omitir hacer o decir lo que ha decidido omitir. Y, tal vez tengan caminos más convenientes para hacer lo que desean hacer, y debemos de señalarle ese mejor camino, pero no olvidemos nuestro trabajo como otro ser humano: desear de corazón y actuar con el ejemplo para esas personas incomprendidas y tachados de malos, y con nuestro aporte estén sanos y salvos, independientemente de la posición en la que estén. 

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